PRÁCTICAS DE SOSTENIBILIDAD

Desde su apertura en noviembre de 2005, Kamalaya Wellness Sanctuary ha adoptado prácticas de sostenibilidad que estimulan la prosperidad y la calidad, generan cambios medioambientales, económicos y sociales y mejoran las capacidades de las personas y organizaciones con las que colaboramos.

Para apoyar el crecimiento de los próximos y futuros líderes de la hostelería, Kamalaya imparte formación in situ a estudiantes del Bhavana Bodhigun Vocational College, que ofrece educación, alimentación, internado y comidas gratuitas a estudiantes tailandeses, entre ellos muchos huérfanos, de entre 15 y 24 años en Koh Samui.

Kamalaya no produce directamente ninguna emisión o contaminante, sin embargo, reconocemos nuestra responsabilidad con el medio ambiente más allá de los requisitos legales y reglamentarios. Nos comprometemos a reducir nuestro impacto medioambiental mejorando continuamente nuestro comportamiento medioambiental como parte integrante de nuestra estrategia empresarial y nuestros métodos operativos, con puntos de revisión periódicos. Animamos a nuestros empleados, proveedores y clientes a hacer lo mismo.

Kamalaya cuenta con un Comité Verde que se encarga de mejorar continuamente nuestras credenciales de sostenibilidad. Todos nuestros anfitriones reciben una exhaustiva formación inicial. Compartimos nuestros valores organizativos, fomentando un entorno de atención, confianza, respeto, equidad y trabajo en equipo en apoyo de la política de sostenibilidad de la empresa. Los anfitriones ayudan en proyectos ecológicos dentro de la comunidad de Koh Samui y participan como voluntarios en iniciativas mensuales de limpieza de playas y comunidades, reutilizando y reciclando simultáneamente tantos recursos como sea posible.

Los residuos alimentarios se convierten en abono para los jardines, las aguas residuales se procesan y se utilizan para jardinería, y las cocinas de Kamalaya utilizan refrigeradores de bajo consumo. En la medida de lo posible, los alimentos proceden de fuentes orgánicas y locales. Kamalaya utiliza pajitas y envases de comida biodegradables, productos de limpieza naturales, espray y espirales antimosquitos ecológicos, y no tiene botellas de plástico en las instalaciones, el agua viene en botellas de cristal reciclables y a los huéspedes se les obsequia con botellas de agua rellenables a su llegada.

Para los edificios de Kamalaya sólo se ha utilizado madera autóctona, en lugar de teca, que conlleva un alto coste ecológico por la deforestación de los bosques tropicales. Las habitaciones, las salas de masajes al aire libre y los pabellones de yoga están construidos para potenciar la circulación natural del aire y se instalan mosquiteras para permitir la circulación del aire y la vida al aire libre. La iluminación del jardín y la piscina se mantiene al mínimo y el aire acondicionado se ajusta teniendo en cuenta el consumo de energía.

Las suites superiores de Kamalaya tienen calefactores alimentados por energía solar, mientras que todas las habitaciones utilizan la función de ahorro de aire acondicionado, que es un dispositivo de aire acondicionado con microcompresor que reduce el consumo de energía para refrigeración en un 20% de media. Los lavabos están equipados con cabezales de ahorro de agua y se anima a los huéspedes a ahorrar agua y reutilizar toallas y sábanas siempre que sea posible.

En Kamalaya se cultiva la desintoxicación digital y no hay WiFi disponible en las zonas públicas, lo que naturalmente reduce el uso de dispositivos electrónicos, reconectando a los huéspedes con la naturaleza y el medio ambiente.

En diciembre de 2022, Kamalaya firmó el Compromiso de Viajes Sostenibles de la UNESCO, cuyo objetivo es promover los viajes sostenibles, la resiliencia de las comunidades y la conservación del patrimonio en todo el mundo.

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